Guatemala, como varios de los países de Centroamérica, tiene una profunda herencia española y sus celebraciones religiosas son una muestra de la influencia ibérica. La temporada de cuaresma es parte de ese legado cultural, que ha aportado un sazón muy particular. Uno de los platillos más sobresalientes de la cuaresma guatemalteca es definitivamente el pescado a la vizcaína, una delicia que anotamos en los primeros lugares de la lista de Favora.
El platillo usualmente se prepara con bacalao o pescado seco envuelto en huevo, aunque puede emplear varios tipos, estos dos son los más comunes. El contraste salado del pescado, las aceitunas y alcaparras, así como su salsa tradicional son una exquisitez para el paladar. Te recomendamos combinarlo con tamalitos salados para tener una experiencia completa y muy deliciosa.